PlayStation Portal se presentó por sorpresa. El nuevo accesorio de Sony llegaba para reimaginar una Vita adaptada a los nuevos tiempos, pero tras la confusión inicial, todos nos dimos cuenta de que no era una consola independiente. Es, como decíamos al principio, un accesorio de la PlayStation 5 que permite jugar en remoto a los juegos que tengamos instalados en la consola.
Hemos estado probando Portal con acceso anticipado, y lo cierto es que las sensaciones que nos deja se quedan un poco a medio camino entre las posibilidades que, sobre el papel, podría desarrollar este dispositivo. En primer lugar, no es una consola. Es una pantalla remota para conectarte a tu PS5 dentro de la misma red local sin ocupar la TV, o hacerlo fuera de casa siempre que tengas disponible una buena conexión de red. El término pantalla remota ya nos dice la mayoría de cosas que tienes que saber sobre PlayStation Portal: tu PS5 tiene que estar encendida, puesto que es la que ejecuta los juegos y trasmite el stream a Portal. De hecho, si usas Portal con tu TV encendida, verás como se duplican las acciones de PlayStation Portal en tu televisión o monitor.
Sony ha diseñado Portal para que permita el encendido de la consola si está en remoto, dentro y fuera de tu red, pero que la consola está encendida es necesario. Nada de juego en streaming desde la nube. La única nube a la que se conecta Portal es a la de tu propia consola. Esto implica que la configuración de tu red, y la potencia de la conexión, sobre todo si la usas fuera de casa, supone un componente fundamental del buen funcionamiento de PlayStation Portal.
La experiencia de PlayStation Portal depende 100% de tu conexión a internet
Y cuando decimos fundamental, es que es fundamental. Incluso con una conexión de 1Gb, red Mesh y consola conectada por cable, si estamos descargando un juego en la PS5 y ejecutando otro a la vez que trasmitimos a Portal, la conexión se resiente. Esto implica directamente que juegos que necesiten poca latencia están descartados. Olvídate de jugar competitivo con Portal. Aunque es posible, en la práctica es tremendamente complicado.
Teniendo esto claro, Portal viene a integrar en un mismo dispositivo el juego Remoto de PlayStation y las posibilidades de DualSense. En esto Sony se ha currado el dispositivo. El proceso de configuración es muy sencillo: solo hay que conectar Portal a una red Wi-Fi, hacer login con tu cuenta de PlayStation usando la app móvil y el QR (o introduciendo los datos manualmente) y activar en la PS5 las opciones de juego remoto. Listo. En unos minutos, dependiendo de tu conexión, tendrás disponible el escritorio completo de tu PS5 en la portátil, con acceso a casi todas las funciones, excepto a los cambios de perfil y algún que otro ajuste.
La conexión entre Portal y la PS5 es rápida siempre y cuando tu red sea rápida, y lo cierto es que con un toque, es capaz de activar la PS5 del reposo, y conectarse ala misma. Lógicamente, dentro de tu red local siempre es más rápido que fuera de casa, pero el tiempo en ambos casos o son mínimos o sin aceptables. Y listo. Tendrás disponibles dos los juegos de tu PS5, e incluso podrás descargar de forma remota a tu consola cualquiera comprada en tu cuenta o comprar directamente uno nuevo. Para los físicos, eso sí, tendrás que tener el disco en tu consola antes de acceder de forma remota al juego, puesto que Portal no es más que un espejo a tu PlayStation 5 de casa.
Una vez activada la conexión, los juegos se ejecutan rápido, y la calidad es bastante buena para jugar en movilidad. Esta se va adaptando a la calidad de tu conexión, por lo que la calidad de la misma va variando a lo largo de la sesión de juego. El máximo, eso sí, es de 1080p y 60 FPS, que es el máximo que soporta la pantalla de 8 pulgadas de PlayStation Portal.
Respecto a la latencia, pues está ahí. Para los juegos de un solo jugador no es un problema a no ser que se requiera precisión. Por ejemplo, en juegos como Elden Ring te puede jugar alguna que otra mala pasada, pero en general funciona correctamente y pese a que se siente y está presente, no supone un problema una vez estabilizada la conexión con la consola para la mayoría de juegos que no son multijugador. Apenas hay diferencias en la práctica entre jugar en la red local o hacerlo fuera de casa si ambos puntos de acceso tienen una buena velocidad de subida y bajada, por lo que es una alternativa interesante para jugar en movilidad fija.
Otro asunto es compartiendo la conexión móvil. En este caso la calidad del streaming sí que baja enormemente, aunque estemos usando una conexión 5G. La calidad del juego se reduce, aparecen muchos artefactos en el vídeo y en el audio, y tanto la latencia como el «buffer» es mucho más notorio que si usamos una conexión Wi-Fi en condiciones. ¿Es injugable? En absoluto, pero aquí la cobertura o la calidad de la red móvil son vitales. Y no solo para ver bien el contenido en la pantalla, que en ocasiones parece 360p, también para que los controles respondan a una velocidad apta para el juego que estemos reproduciendo.
Lógicamente, tendremos que hacer más pruebas para saber que tal se comporta en entornos diferentes, y sobre todo, como afecta su uso en casa mientras en otros dispositivos se están reproduciendo contenidos en 4K o la red está más saturada que de costumbre. Lo mismo la batería. En nuestras primeras pruebas cumple de forma sobresaliente, pero de nuevo habrá que ver como se comporta en diferentes situaciones, algo que detallaremos en nuestra reseña.
Un apunte importante: PlayStation Portal no tiene Bluetooth, por lo que si pensabas usarla con unos auriculares inalámbricos como los AirPods vete olvidando. Solo es compatible con auriculares PlayStation Link, como los Explorer, que se pondrán a la venta en España el próximo 6 de diciembre de 2023. No obstante, tiene jack de auriculares, por lo que podrás usar cualquier modelo por cable. Y otro, pero que, quizás sea algo personal, los Joystick son más pequeños que los del DualSense y, por tanto, se hace un tanto extraño en la memoria muscular.
Sin noticias del juego en la nube
Otra cosa a tener en cuenta. No funciona con el juego en streaming de PlayStation Plus, algo que quizás llegué en un futuro, pero de momento solo es para tus juegos instalados localmente en la consola. Las razones de estas limitaciones no están todo claras, pero la canibalización de productos sí se nos ha pasado por la cabeza. Si solo quieres jugar a un juego en streaming, ¿para qué pagar los 500 euros de la PS5 si tienes una experiencia compacta por la mitad? Esta puede ser la razón por la que Sony no permite, de momento, el juego en streaming de Plus desde Portal. O al menos no sin pasar antes por una PS5.